Bioenergía, aura, chacras y cordón de plata - Carrera de Parapsicologia

 Bioenergía, aura, chacras y cordón de plata

 

“Tenía una conciencia muy clara de ser únicamente alma, estaba únicamente cubierta de luz, no tenía forma alguna, sólo aquella conciencia absoluta de ser un alma… Estaba, al mismo tiempo, formada por un cuerpo astral, por un cuerpo mental y, entre los dos, el cuerpo causal. Y vi también la cuerda de plata y mi cuerpo físico en la cama. Lo que unía entre sí la cuerda de plata era el cuerpo físico, inmóvil en la cama, y los otros tres, el astral, el mental y el causal, pero el alma no estaba unida a los demás por la cuerda de plata. Me encontraba como perpleja, porque tenía antes la plena seguridad de que en el momento en que dicha cuerda dejaba de unir al alma con el cuerpo o con los cuatro cuerpos de que acabo de hablar, el ser humano se moría. Pero no es así. Lo que relaciona el alma con sus cuatro cuerpos no es la famosa cuerda de plata, sino algo que yo vi entonces con toda claridad, y son como unos rayos de sol, unos rayos de oro que brotan del alma y luego interpretan los cuatro cuerpos, como el chakra de los hindúes.”

 


Así se expresaba Anne-Marie Dinkel, una “sensible” suiza de carácter extraordinario, en una entrevista realizada por los años setenta por el investigador de los fenómenos que comprende la parapsicología o la parapsíquica, Vintila Horia, comentando su experiencia más significativa en el campo de los viajes astrales y el conocimiento íntimo del alma humana. Decía que la primera vez que tuvo conciencia de sus poderes fue antes de nacer. Se encontraba en un lugar al que algunos llaman “el jardín cósmico”, el sitio donde las almas esperan el momento en que quieran volver a la tierra, encarnarse. Es en este lugar donde uno espera hasta que encuentra a sus padres; en definitiva, a todos los componentes propicios para que el alma pueda regresar a un cuerpo material.

 “El alma tiene que volver a vivir aquí para saber más, para aprender, para volver a hacer bien lo que había hecho mal. En el jardín cósmico no se aprende nada, allí se espera sencillamente”.

 

El escritor rumano Vintila Horia (Sagarcea, 1915) falleció ayer en Madrid, ciudad en la que se asiló desde 1953, y donde participó

activamente en la vida académica y universaria hasta hace varios meses, en que se lo impidió el inicio de su dolencia, un tumor cerebral. Horia era un escritor de formación nacionalista, pero defendió la creación de un orden supranacional europeo, basado más en las coincidencias culturales que en estructuras concretas de poder, lo que le llevó a disentir con el desarrollo del nacionalsocialismo.

Es en otro plano donde el alma se encuentra con “existencias”, o bien “amigos-guía”, que enseñan al alma la realidad de la existencia o el momento idóneo para encarnarse de nuevo. Es en este plano al que también las almas, en el momento de la muerte física, se reencuentran con amigos de vidas anteriores, así como “guías o seres de luz” que ayudan a tomar la decisión que por ellos mismos aún no están en condiciones de aceptar, en el caso de que la misión en la existencia física todavía no se haya completado. “Vi entonces otras luces moviéndose entre la niebla. Eran como sombras, a veces sin figura alguna, seres que habían perdido su personalidad, que no lograban recordar quiénes eran y a los que hay que reintegrar a su verdadera personalidad. Y todas aquellas luces que se movían en la niebla eran guías que venían desde la Tierra, como yo, y ayudaban a aquellos seres perdidos que no sabían aún donde se encontraban, o que, debido a la violencia de su muerte repentina, habían dejado de tener una conciencia”.

 En una operación de cesárea en la que se produjo la muerte clínica, una vez convencida de la necesidad de reintegrarse a su cuerpo, comentaba: “Noté como una fuerza que me empujaba o, mejor dicho, me tiraba hacia abajo. Y luego oí un ruido fuerte, como una ventana que se cerraba o como la tapa de una caja. Mi cuerpo, probablemente, que volvía a cerrarse en torno a mí”. Más adelante, afirma: “Yo he visto mi propia cuerda de plata; una vez me la enseñaron cuando me encontraba fuera de mí y la vi cómo se volvía azul, luego gris y cada vez más delgada. Entonces, el guía que me acompañaba me empujó hacia abajo, para volver en mí y que el contacto no se rompiese. ¿Se da cuenta? En el fondo no hay ningún peligro.

 Si la muerte no tiene que suceder, nadie puede cortar el contacto. Los que mueren es porque ha llegado su momento”. “Esta nube -que algunos podemos distinguir- es lo que se llama el cuerpo etéreo, lo que lo tiene todo junto, alma y cuerpo, lo que hace posible la existencia psicosomática… es la misma materia que los físicos describen como uniendo entre sí los átomos y las moléculas, lo que antes se llamaba el vacío. Tal vacío no existe, está compensado por algo, por esta eternidad física y material”. Pero este aura o cuerpo etéreo no sigue al alma después de su peregrinación, se diluye en el aire, como un gas, y debe desaparecer, puesto que su misión de unir alma y cuerpo ha terminado.


La sensitiva y médium Concetta Bertoldi comenta a su vez, que los guías espirituales son seres que han pasado por numerosas vidas en este mundo. La mayoría siguen reencarnándose, aunque algunos han evolucionado más allá del proceso de reencarnación; se han apeado de lo que los hindúes denominan “la rueda de la vida”. Define al Más Allá más bien como un estado o condición, las cosas tienen una calidad completamente diferente, todo allí es perdón, amor. Tiene muchas características que pueden parecer tangibles, solo que más puras, bellas y vibrantes, incluso más reales que lo que aquí conocemos por realidad. Allí nos movemos en una mezcla entre flotar, andar y volar a la vez, es como gravitar hacia la luz. Recordamos cada instante de nuestro pasado con todo detalle. Contemplamos y comprendemos todas las consecuencias de las acciones e interacciones con todos aquellos con los que nos hemos encontrado. Y por fin entendemos cuál ha sido nuestro objetivo en esta vida.

“Se encontraba en un lugar al que algunos llaman “el jardín cósmico”, el sitio donde las almas esperan el momento en que quieran volver a la tierra, encarnarse.”

Una clave para entender dónde radica la capacidad de acercarnos al mundo más allá de lo sensorial, a esa intrigante dimensión en la que se derrumban y pierden sentido las nociones comunes de nuestra existencia material, podría ser la glándula pineal. Según el doctor en biología Saskia Bosman, la pineal es una suerte de módem entre el mundo físico y otras dimensiones, entre el mundo material espacio-tiempo que experimentamos a través de nuestros sentidos y ese vacío infinito que contiene las supradimensiones, las cuáles percibimos como el interior llamado “paranormal”, las experiencias extrasensoriales, los sueños, la clarividencia, telepatía, etc.

 


La tradición hindú lo asocia al sexto chakra, que rige el tiempo, la percepción y la luz. Algunos investigadores sugieren que la glándula pineal es también el órgano sensorial del magnetismo, un sexto sentido que trasforma las ondas electromagnéticas en estímulos neuroquímicos. Así, los indicadores cuantitativos de la mayor o menor cantidad de cristales de hidroaxiapatita en la epífisis -glándula pineal- están directamente relacionados con la capacidad mediúmnica. Quizá, los que nacemos con déficit en ésta somos los que no podemos decodificar cierta información extrasensorial, que clarividentes, telépata y médiums que la poseen en mayor proporción sí son capaces de descifrar. Es en este punto donde podemos incidir en que las filosofías y doctrinas espirituales y religiosas orientales sostienen que de hecho sí se pueden desarrollar las capacidades psíquicas, abrir el sexto chakra -glándula pineal-, despertar el tercer ojo…

Veamos lo que nos contaba Lobsang Rampa sobre este despertar y la apertura del sexto chakra, y su relación con el cordón de plata, en su conocido libro “El Tercer Ojo”:

“Para nosotros el cuerpo no era más que una cáscara o caparazón animado por la auténtica personalidad de cada cual, el Superser, que toma las riendas cuando uno se duerme o se muere. Durante el sueño el hombre regresa a otro plano de existencia. El espíritu se aparta del cuerpo físico y sale flotando en cuanto llega el sueño. El espíritu mantiene su contacto con el cuerpo físico por medio de un «cordón de plata» que no se rompe hasta el momento de la muerte. Y nuestros ensueños, mientras estamos dormidos, son vivencias que se realizan en el plano espiritual del sueño. Cuando el espíritu regresa al cuerpo, el choque del despertar desquicia la memoria onírica a no ser que se esté entrenado especialmente”.


“El aura que rodea el cuerpo y que cualquier persona, bajo las adecuadas condiciones, puede aprender a ver, no es más que un reflejo de la Fuerza Vital que arde en él. Creemos que esta energía es eléctrica, lo mismo que el rayo”.

“En el Tíbet viajamos mucho por medio de la proyección astral -no por levitación-, y se trata de un procedimiento que podemos controlar a voluntad. Hacemos que el yo abandone el cuerpo físico, aunque siga unido a él por el Cordón de Plata. Podemos viajar por donde queramos con la mayor velocidad concebible. La mayoría de nosotros posee la habilidad de realizar esos viajes, pero muchos, después de haberse lanzado, han sentido un gran choque psíquico por falta de entrenamiento. Probablemente todos han tenido la sensación de dormirse y luego, sin razón aparente, despertarse violentamente, como por una fuerte sacudida. Esto se debe a una exteriorización del yo excesivamente rápida, una separación demasiado brusca de los cuerpos físico y astral. Esta violenta contracción del Cordón de Plata hace que el cuerpo astral vuelva, como si tirase de él un elástico demasiado distendido, a introducirse de nuevo en su vestidura física. De todos modos, la sensación es mucho peor cuando se regresa después de un viaje.

 

El ser astral está flotando a enorme altura sobre el cuerpo como un globo al extremo de una cuerda. Algo, quizá un ruido externo, hace que el astral se reintegre al cuerpo con excesiva rapidez. Entonces, el cuerpo despierta repentinamente y tenemos la horrible sensación de estar cayendo por un precipicio y de habernos detenido en el mismo momento en que íbamos a estrellarnos”.

 “Creemos que estamos en la Tierra para aprender y que en ella es donde sufrimos todas las torturas que se atribuyen al infierno. El Otro Sitio es para nosotros aquél donde vamos cuando salimos del cuerpo, o sea el sitio en donde encontraremos a otras entidades que también se han liberado del cuerpo. Y no es esto lo que se llama espiritualismo, sino una creencia muy concreta en que durante el sueño o después de la muerte podremos movernos con absoluta libertad por los planos astrales. A los más elevados de estos planos los llamamos «La Tierra de la Luz Dorada». Estamos seguros de que cuando nos encontremos en lo astral -después de la muerte o durante el sueño- podremos encontrar allí a las personas amadas, porque estamos en armonía con ellas. Y nunca veremos a las personas por quienes sentimos antipatía, ya que ese estado de desarmonía no puede existir en la Tierra de la Luz Dorada”.


“Somos almas inmortales. Nuestra plegaria: «Om mani padme Hum!» se suele traducir al pie de la letra de este modo: «¡la Joya del Loto!» Los que hemos avanzado un poco más en nuestra religión sabemos que su verdadero significado es:

«el Súper-Ser del hombre!» No existe la muerte. Como uno se quita la ropa al terminar la jornada, lo mismo se quita el alma al cuerpo cuando éste se duerme. Así como se desecha un traje cuando se ha gastado, también desecha el alma al cuerpo cuando está excesivamente usado o se ha roto. Morir no es más que el acto de nacer en otro plano de la existencia. El Hombre, o el espíritu del Hombre, es eterno. El cuerpo es sólo la vestidura temporal que cubre el espíritu y es elegido según la tarea que corresponda a cada persona en la Tierra. La apariencia externa carece por completo de importancia”.

Sobre el cordón de plata ampliamente difundido por la tradición esotérica y su relación con el cuerpo astral y el físico, se afirma que es una masa de moléculas que vibran a una velocidad altísima; y a pesar de que el conjunto de partículas que lo forman contienen todos los colores existentes, su conjunto desde fuera parece plateado. Este cordón es infinitamente extensible y sin límites, y el ser humano que viaja en el astral, al separarse de su cuerpo flota al extremo del cordón de plata de una forma similar a la de una cometa al final de su cuerda. Cuando el cuerpo físico demanda su parte astral éste es tirado hacia abajo igual que si tiramos de una cometa.

 


El Cordón de Plata une la Supraconciencia o Ser Superior con el cuerpo humano. Impresiones, lecciones, órdenes y, de vez en cuando, alimento espiritual, proceden del Ser Superior hacia el cuerpo humano, y cuando éste muere, el cordón de plata se corta y el cuerpo humano es dejado aparte, como si fuera ropa vieja e inservible que ya terminó su función, mientras el espíritu continúa. Tanto si viajamos en el presente como si nos introducimos en los Archivos Akáshicos, que contienen toda la información sobre la existencia humana, el cordón de plata es la cuerda de seguridad y comunicación entre lo que percibimos y el plano físico donde se encuentra el cuerpo. Toda la información nos es transmitida a través de él. Gracias a la capacidad infinita de extenderse que tiene podemos viajar a todos los planos de existencia, siempre que nuestra evolución y color de nuestra aura nos los permitan.

La firme convicción en la existencia de ese cordón de plata es antiquísima. Los iniciados en el viaje saben que pueden trasladar el cuerpo astral a grandes distancias mientras el cuerpo físico reposa aparentemente dormido. La conciencia viaja porque goza del privilegio de no estar condicionada por el espacio ni por el tiempo.

El viaje astral -ligado siempre al cordón de plata- es algo que no puede ser descrito con palabras, pues es lo más grande que puede conseguir el ser humano. El mundo astral consta así de numerosos planos y subplanos que se extienden en serie ascendente desde el más cercano al mundo físico hasta el más cercano al mundo espiritual. Entre estos dos extremos se puede observar innumerable variedad de fenómenos y fases de existencia. En los subplanos inferiores del mundo astral se manifiestan las actividades psíquicas llamadas clarividencia, clariaudiencia, telepatía, psicometría, etc. También se manifiestan en estos subplanos inferiores ciertas formas de ectoplasmas, espectros y otras apariciones de almas desencarnadas, que a veces perciben el hombre y algunos animales.

Asimismo, actúan y se mueven en estos subplanos los seres humanos vivientes en el mundo físico, que se desprenden temporalmente de su cuerpo físico durante el sueño o el éxtasis, o deliberadamente, mediante técnicas apropiadas de meditación. Los colores astrales son los de las auras que circuyen el cuerpo físico de todo ser humano, y se manifiestan en algunos subplanos del astral. En otros subplanos se manifiestan los fenómenos psíquicos, las formas de pensamiento, las ondas y nubes mentales que influyen en la mente y el ánimo de quienes tienen su misma tónica psíquica.

 


El moribundo va desprendiéndose poco a poco de su cuerpo físico y, al expirar, queda el alma revestida del cuerpo astral, que es exacta contraparte del físico con el que ha coincidido durante la vida terrena. Es el cuerpo astral una forma de materia mucho más sutil que la física, de modo que escapa a todas las pruebas que revelan la materia ordinaria. En el momento de la muerte, el cuerpo astral queda enlazado con el cadáver por un tenue cordón de materia aérea, que al fin se rompe, y queda entonces el cuerpo astral libre, como externa envoltura del alma.

Pero este cuerpo astral no es el verdadero ser humano, como tampoco lo era el cuerpo físico, pues ambos no son más que temporales envolturas del alma. Al dejar el cuerpo físico, el alma se sume en profundo sueño o estado comatoso, semejante al del feto en el claustro materno, y así se predispone a nacer en el mundo astral, pues necesita tiempo para adaptarse a las nuevas condiciones y cobrar la fuerza y vigor requeridos por la nueva fase de existencia.

 


“El viaje astral -ligado siempre al cordón de plata- es algo que no puede ser descrito con palabras, pues es lo más grande que puede conseguir el ser humano.”

La Naturaleza abunda en estas analogías. El nacimiento en el mundo físico tiene muchos puntos de semejanza con el nacimiento en el astral y ambos están precedidos por un período comatoso. Después de la muerte física permanece el alma dormida en el cuerpo astral que le sirve de protectora envoltura, como la matriz protege al feto. Al decir que el alma se desprende de su lastre terreno significamos que se dispone a desecharlo, porque el proceso efectivo de desecho o desprendimiento del lastre terreno comienza inmediatamente después del despertar. Cuando el alma siente el impulso de reanudar la vida, se despereza lenta y lánguidamente, como hace el hombre terrenal al despertar de un largo y profundo sueño. Entonces, a manera de mariposa que surge de su crisálida, se desprende el alma del cuerpo astral y en rápida sucesión desecha los elementos inferiores de su humana naturaleza. Este proceso es muy corto y se efectúa mientras el alma va recobrando lentamente su conciencia. Cuando despierta del todo, se halla el alma libre del lastre de su personalidad y abre los ojos al escenario de sus nuevas actividades en el mundo astral.

Cada alma está destinada a vivir esta otra vida en el plano congruente con sus mejores cualidades después de sacudida la escoria de la personalidad. Puede así el alma progresar notablemente en el mundo astral y durante su vida allí purificarse de modo que vaya subiendo de nivel. Muy admirable y hermosa es la circunstancia de que el alma despierta viva en el plano correspondiente a sus mejores cualidades. Al punto reconocemos que esta circunstancia satisface los anhelos de nuestra alma y las vivas ansias de nuestro corazón mientras estamos en el mundo físico.

El alma humana subsistirá millones de eones después de que esta Tierra y millares como ella se hayan desintegrado y restituido su materia a la sustancia originaria de la que surgieron. Dar importancia primordial a la vida planetaria de la Tierra en el orden cósmico es contrario a las enseñanzas de los sabios. Además, no es cierto, como muchos reencarnacioncitas se figuran, que en la presente etapa de su evolución sólo pueda progresar el alma encarnada en el mundo terreno. Si bien es verdad que la mayoría de los seres humanos han de pasar muchas encarnaciones terrestres antes de alcanzar la liberación, también es cierto que cuando el alma llega a la etapa de evolución espiritual en que ya no la atan lazos terrenos, entonces es imposible que ni por un momento vuelva obligadamente a la tierra.

Hay actualmente muchas almas que en los planos superiores están desprendiéndose de las ligaduras terrenales porque han entrado en la etapa final de la humana evolución.

 

 

También hay ahora en la Tierra muchas almas que están pasando su última encarnación y al morir su cuerpo físico irán a esferas sin relación directa con el mundo físico. Existen asimismo otras almas muy adelantadas en el camino de la liberación, que sólo han de reencarnar una vez más en este mundo, para después alcanzar un excelso estado de espiritualidad y sabiduría.

Cuando el funcionamiento de los chakras es normal, cada uno de ellos estará abierto, girando en el sentido de las manecillas del reloj para metabolizar las energías particulares que necesita del campo de energía universal.

Cuando el chakra gira en sentido contrario a las agujas del reloj, la corriente fluye del centro hacia fuera, con lo que interfiere el metabolismo. Por tanto, se dice que el chakra está cerrado o bloqueado a las energías que llegan. La mayoría de las personas tienen tres o cuatro chakras que giran en sentido contrario en un momento determinado. Como los chakras no sólo son metabolizadores de la energía, sino que también la detectan, sirven para proporcionarnos información sobre el mundo que nos rodea. Si bloqueamos algún chakra, no dejamos que entre la información. Por tanto, cuando nuestros chakras fluyen en sentido contrario a las agujas del reloj, hacemos salir nuestra energía enviándola al mundo, detectamos la energía que hemos enviado y decimos que eso es el mundo. Es lo que en psicología se llama proyección.

La realidad imaginaria que proyectamos al mundo guarda relación con la “imagen” que nos hemos formado de aquél a través de nuestras experiencias infantiles, a través de la mente del niño que fuimos. Dado que cada chakra está relacionado con una función psicológica específica, lo que proyectamos a través de cada uno de ellos estará dentro del área de funcionamiento de dicho chakra y será algo muy personal, ya que la experiencia vital de cada persona es única.

La glándula pineal, que suele asociarse con el sexto chakra, es rica en un derivado de la serotonina, llamado melatonina. Este compuesto se metaboliza fácilmente en una molécula de tres anillos llamada 10-metoxiharmalano, dotada de propiedades alucinógenas, es decir, que induce visiones interiores. La glándula pineal contiene fotoreceptores y… la luz y las experiencias visionarias desempeñan un papel importante en ese plano de la conciencia. Los estudios parecen indicar que la melatonina y la glándula pineal en general presentan efectos de inhibición sobre las glándulas femeninas y masculinas de los mamíferos. Y también se cumple la recíproca, es decir que las hormonas sexuales como la testosterona, los estrógenos y la progesterona, inhiben a su vez la secreción de melatonina. De ahí cabe deducir que la actividad sexual, por cuanto estimula dichas hormonas, podría afectar negativamente a la apertura de ese chakra del tercer ojo; inversamente, un exceso de actividad de los centros superiores tal vez perjudique al impulso sexual.

Pero… ¿de qué luz se habla? ¿Puede también referirse a su vez a la luz espiritual, al aura, al plano astral? De todo lo anterior podemos sacar la conclusión de que la apertura del tercer ojo, en consonancia con el sexto chakra hindú, se puede realizar usando y activando de forma consciente la glándula pineal, que se va atrofiando por diferentes causas a lo largo de la vida, que sería como el ojo de la aguja por donde transita el cordón de plata que une todos nuestros cuerpos, o asimismo esos rayos de oro que veía Anne-Maríe Dinkel que nos posibilitan acceder a los planos superiores de conciencia.

“La apertura del tercer ojo, en consonancia con el sexto chakra hindú, se puede realizar usando y activando de forma consciente la glándula pineal.”

Por lo visto anteriormente, estamos en condiciones de afirmar que ese despertar a una supraconciencia no es asunto imposible, puede estar al alcance de todos los seres humanos, no es magia ni espirtitismo, incluso quedaría fuera del ámbito de la parapsicología, ya que pasaría a ser la restitución de un poder perdido, que quizá en tiempos ancestrales disfrutábamos, y para lo cual poseemos un órgano material que lo hace posible.

Un personaje extraordinario, llamado Gustav Rol, al que se le ha definido como el “sensitivo” más importante del siglo XX, el último y auténtico Maestro Espiritual, cuyos poderes abarcaban cualquier aspecto psíquico imaginable, aclaraba cuando se le preguntaba sobre el origen de sus poderes: “Yo soy una persona cualquiera. No tengo nada que ver con los médiums, los curanderos, los espiritistas que usted entrevista. Éste mundo está lejos de mi mentalidad. Mis modestos experimentos forman parte de la ciencia. Son cosas que en el futuro todos los hombres podrán realizar. Siempre he pensado no ser un sensitivo, un vidente, médium, taumaturgo ni nada por el estilo. Es todo un mundo, el de la Parapsicología, al que no pertenezco, aunque haya conocido personas verdaderamente dignas y animadas con intenciones nobilísimas. Se escribe demasiado sobre mí, y muchos de los que lo han hecho pueden decir que me he quejado por la publicación de una vasta gama de fenómenos y nunca de lo que transmito, en el intento de dar una explicación a estas cosas indagando sobre cómo y por qué se producen ciertos eventos maravillosos.

 


Según le revelaba al escritor Leo Talamonti: “No hay causalidad mecánica y tampoco casualidad: es el triunfo de la voluntad sobre lo imprevisible, de la armonía creadora sobre la casualidad”. Todo le sobrevino en 1927, mientras estaba observando un arcoíris. Le encantó tanto aquel color verde que permanece en el centro de la inmensa faja irisada, que no pudo apartar los ojos de él. Lo sintió vivir en sí como pura vibración inmaterial, a la vez que advertía que aquella vibración le evocaba otra, correspondiente a la quinta nota musical, la nota sol. Sintió entonces que lo invadía una sensación de calor que se iba irradiando desde la base del cráneo. Al mismo tiempo se encontró interiormente transfigurado, como si su yo de antes hubiera cedido el puesto a otro yo más grande, más fuerte y capaz de vibrar en la onda creativa del propio Cosmos… Entonces advirtió que podía conocer cosas que permanecían escondidas a los demás y que, dentro de ciertos límites, imponen su voluntad hasta a las fuerzas de la Naturaleza. Había descubierto el secreto de lo que él llamaba “consciencia sublime”.

EL AURA La luz que rodea a los cuerpos

Kirlian y su esposa Valentina pasaron los últimos 40 años de sus vidas, trabajando en este descubrimiento; en busca de mejores formas para desarrollar el que se ha dado en llamar efecto Kirlian.

 


El 25 de enero de 1981 falleció en la ciudad de Calgary, en la provincia canadiense de Alberta, el súbdito británico Cyril Henry Hoskin, quien había alcanzado en vida enorme fama bajo el seudónimo de Lobsang Rampa y por haber escrito la novela El tercer ojo, de la que se vendieron millones de ejemplares en todo el mundo. Quienes leyeron esta novela recordarán que, mediante una operación quirúrgica considerada mágica, el protagonista adquiría la facultad de ver a los demás rodeados de una aureola luminosa.


Esa aura le permitía conocer no sólo el estado actual de salud de cualquiera, sino también los males que podría contraer en el futuro y cuáles eran sus sentimientos y su moralidad.

¿Se divertía Lobsang Rampa, protagonista de la serie de relatos, diciendo embustes a los ingenuos, o procedía de acuerdo con la verdad?

Los antiguos sabían qué es el aura

No faltan las personas que consideran el aura una invención de los esoteristas. Pero parecen ignorar que este concepto era ya conocido en la antigüedad. Los primitivos habitantes de las cavernas dibujaron a veces el aura rodeando el cuerpo de los seres pintados en los muros (aunque los adeptos al fenómeno OVNI afirman que se trata de cascos espaciales utilizados por los antiguos extraterrestres). Los egipcios decían que el ser humano posee diversas partes invisibles que se presentan en forma de halo rodeando a la cabeza. Los musulmanes colocaban una especie de corona de fuego en algunos personajes distinguidos y al mismo Mahoma lo mostraban con una llama en lugar de cabeza. 


El médico griego Empédocles declaró en el siglo V a. C. en la ciudad siciliana de Agrigento, algo relacionado con una sustancia luminosa que se desprende del cuerpo. Su contemporáneo Demócrito añadió que esa sustancia luminosa estaba formada por corpúsculos, una radiación de composición formada por átomos.

Los artistas medievales se apropiaron de este concepto al pintar a los santos con un halo en torno a la cabeza. Y dejaban el aura para todo el cuerpo cuando era la Sagrada Familia la que figuraba en sus cuadros. ¿Sabían los artistas por qué pintaban aquel halo o lo hacían porque, antes que ellos, lo habían hecho los pintores de antaño?

Estos conocimientos era cosa sabida ya en la India, donde existía una doctrina sobre el Prana, energía del Cosmos contenida en los elementos físicos y biológicos del ser humano, que podía captarse mediante ejercicios especiales, como lo del yoga. La misma doctrina citaba a unas capas que envuelven al cuerpo humano, a las cuales se referirían, a fines del siglo XIX, los teósofos encabezados por Madame Blavatsky. Estas capas, o auras, con como sigue: la de la salud, de la vida, del karma, del carácter y de la vida espiritual, y cada una de ellas posee un color distinto.

 

Los curiosos hallazgos de un médico inglés

 

A nadie se le había ocurrido averiguar, llegados ya a la era de los descubrimientos científicos, en qué consiste el halo y si acaso se trataba de tonta superstición. Pero en 1900 se dio el primer paso, cuando el Dr. Kilner realizo una curiosa experiencia en el hospital St. Thomas, en Londres. Bañó un cristal con dicianina y miró a través de él a un paciente. Vio una neblina luminosa de varios colores en torno a su cuerpo, brillantes unos y apagados otros. Llegó a la conclusión, después de repetir la prueba con enfermos y sanos, de que la fatiga, la enfermedad y los estados de ánimo alteraban el color y la consistencia del halo.

Una vez provisto de un archivo abultado de observaciones, el Dr. Kilner informó de su hallazgo a la Asociación de Médicos, creyendo que le estaba haciendo un enorme bien a la humanidad en general y a la ciencia de diagnosticar en particular. Pero solamente recibió burlas de sus colegas. Se desalentó e interrumpió las experiencias, sin verificar si estaba totalmente en lo cierto o si eran sus queridos colegas los que tenían razón. De haber estudiado un poco más el fenómeno y leído algo sobre el tema, se habría enterado de cosas muy interesantes.


Eileen J. Garrett, nacida en Beauparc (Escocia), ha sido una de las médiums más respetadas del siglo XX. Sus contribuciones a la investigación, y a los fenómenos desarrollados a través de su mediumnidad siguen siendo inconmensurables. 

Se habría enterado de que los médiums se ufanan de ver el aura de los seres humanos, de los animales y hasta de las plantas, y que la médium inglesa Eileen Garrett conocía la forma de que las personas no dotadas de facultades psíquicas pudieran percibirlas. Bastaba con colocarse ante un muro blanco, en una habitación que se quedara de improviso en la oscuridad. Al entonar los ojos vería ligeras huellas de energía desprendiéndose en forma de luz por la punta de los propios dedos.

¿De qué modo se origina esta curiosa luminosidad y en qué consiste realmente? Los entendidos en ciencias ocultas explican que no debe llamarse aura a este resplandor, sino cuerpo astral, y añaden que en el interior del cuerpo humano existe otro más, integrado por energía pura que irradia una energía misteriosa. Pero hay también una explicación científica para este fenómeno. O, mejor dicho, hay varias, pero se señalarán sólo dos.

En agosto de 1982, el rumano Floriu Dumitrescu decía que los campos bioeléctricos humanos poseen frecuencias variables y pueden ser fotografiados gracias a los gases ionizados que los rodean, de tal manera que los puntos de energía electrodérmica vienen a corresponder con ciertos puntos que sólo son visibles cuando el cuerpo está enfermo y desaparecen cuando está sano. Es lo que vio el Dr. Kilner con su cristal. Por su parte, Walter Peschka, del Instituto Alemán de Investigaciones Espaciales, opinaba que algunos individuos –como son los médiums- han probado poseer una habilidad para captar los campos de frecuencia electromagnética.

Otra curiosa teoría en torno al aura sería lanzada en 1936 por Humio Inaba, de la universidad Tohoku, en Japón. Decía que, en ciertas enfermedades, como cáncer, diabetes e ictericia, se emite fotones de manera más intensa que cuando los tejidos están sanos. Vio que la sangre de los fumadores es dos veces más luminosa que la de los no fumadores y que regresa a la normalidad después de 24 horas de abandonar el hábito. Estos fenómenos de emisión de fotones biológicos se producen en todos los seres humanos, pero crece cuando hay ciertos desórdenes metabólicos.

Decía el Dr. Inaba que podría deberse a la peroxidación de los lípidos en los tejidos, que conduce a la formación de radicales libres. Es un proceso químico: el oxigeno paramagnético posee dos electrones con el mismo spin en las capas exteriores. Cuando en ciertas reacciones pierde ese oxigeno uno de los electrones se libera un fotón, llamado biofotón por inaba. ¿Tiene que ver este fenómeno con el aura observada en individuos presa de actividad psíquica anormal?

Importante hallazgo de un soviético

 

Semión Davídovich Kirlián (en ruso, Семён Давидович Кирлян; Ekaterinodar actual Krasnodar, 20 de febrero de 1898 – 4 de abril de 1978) fue un fisioterapeuta, inventor e investigador ruso-soviético de ascendencia armenia. Junto con su esposa, la maestra y periodista Valentina Jrisánovna Kirlián (en ruso, Валентина Хрисановна Кирлян; fallecida en 1972), desarrolló un nuevo método de fotografiar objetos de distinta naturaleza por medio de una descarga de gas, lo que permitió observar la emisión de luz por los átomos o moléculas. Es lo que hoy se conoce como cámara Kirlian. 

La ciencia había cerrado los ojos a esta extraña manifestación electromagnética del organismo, hasta que, hace no menos de cuarenta años, un hombre quiso estudiarla y llegó a realizar un curioso descubrimiento.

Semión Davidovich Kirlian tenía un taller de electricidad en la ciudad de Krasnodar, en la región del Cáucaso. Acudía con frecuencia al Instituto de Ciencias local, donde le confiaban los aparatos descompuestos para que intentara arreglarlos.

Un día observó una curiosa luminosidad en un aparato de alta frecuencia para electroterapia en el momento de ser aplicado a un paciente. Era algo tan extraordinario, aquel destello que aparecía entre los electrodos y la piel, que lo primero que hizo fue fotografiarlo. 

Los electrodos eran de vidrio, lo que dificultaba la fotografía del destello. A pesar del peligro que entrañaba la experiencia, Kirlian quiso hacer la prueba con electrodos metálicos. Colocó una placa fotográfica entre un electrón y su propia mano y conectó el aparato. Sintió un agudo dolor, pero no le importó.

Fue a revelar la placa y obtuvo un resultado fantástico: sus dedos aparecían rodeados por una luz extraña, casi fantasmal.

No pensó en la opinión que pudieran tener los científicos, sino que comenzó a hurgar en las bibliotecas, en busca de mayor información. 

En realidad, nada sabía de aquel fenómeno de la luminosidad. Se le ocurrió idear un sistema para fotografiar la energía que se desprender del cuerpo sin lastimarlo. No deseaba sufrir más quemaduras. Tal vez si lograba crear un campo de alta frecuencia entre dos electrodos y colocaba al objeto a fotografiar en medio, pegado a la placa, resultaría como era su deseo.

Fracasó en su intento. Insistió varias veces e hizo una más con una hoja de árbol. Apareció fotografiada una imagen muy extraña, en tonos blancos y grises. Kirlian pasó varios meses trabajando en un nuevo aparato que permitiera fotografiar aquella aura en colores. Cuando estuvo seguro del éxito, volvió a hacer la prueba con su propia mano. Conectó el aparato y al revelar la película descubrió un mundo fascinante, como un caleidoscopio de luces multicolores. Tocó después el turno a una hoja de árbol recién arrancada, que dio una visión rica en colores. Y lo repitió con una hoja seca.

No hubo aura esta vez. La hoja apareció como una ciudad que hubiera quedado de improviso a oscuras. No había dudas de que las luces de colores estaban relacionadas con la energía vital de las hojas. Si la hoja estaba recién cortada, todavía viva, las luces eran brillantes. Si estaba muerta, carecía de aura.

Las siguientes experiencias serían fabulosas

Aquella experiencia no pasaba de ser una curiosidad, sin valor práctico. Era preciso hallar ahora el lado práctico del descubrimiento. Kirlian realizó más pruebas, para estar seguro de los resultados obtenidos, y envió un informe la Academia de Ciencias de Moscú y a otras sociedades científicas del país. Tuvo más éxito que el británico Kilner: no tardaron en acudir a su domicilio diversos interesados en conocer sus métodos.

Uno de ellos entregó a Kirlian dos hojas de la misma especie vegetal, cortadas al mismo tiempo. Deseaba conocer su opinión. Kirlian repitió varias veces las pruebas y llegó finalmente a una conclusión. Pertenecían las hojas a dos árboles diferentes. Uno estaba sano y el otro enfermo. A partir de entonces, el método Kirlian para diagnosticar enfermedades de las plantas fue aceptado por los centros agrícolas de la URSS. Gracias a él podía saberse si lo viñedos, las plantaciones de tabaco y los árboles frutales, entre otros, podrían dar excelentes cosechas o si era necesario curar el mal que muy pronto sufrirían.

Sin embargo, lo que en un principio pareció claro triunfo del antiguo electricista terminó por hundirlo en la desesperación. Ideo el sistema con la esperanza de diagnosticar cualquier enfermedad en los seres humanos, antes de que se manifestara. No en las plantas.

Ningún instituto de salud pública, ningún médico se había dirigido a él en busca de información. Kirlian no lograba comprender por qué se negaban los médicos a utilizar un método tan expedito y seguro para descubrir a tiempo el mal que podía atacar a un ser humano.

Finalmente, tuvo que hacerse a esta idea: la ciencia oficial tiene aún muchos tabúes. No acepta jamás la existencia, sino después de mucho tiempo, de cualquier método para curar que no sea el tradicional. Si un médico hiciera un diagnóstico por medio del aparato ideado por Kirlian y aceptara el aura, significaría que estaba reconociendo algo que jamás había aceptado la ciencia: esa aura. Sería considerado por sus colegas como un charlatán y tal vez sería dado de baja de su honorable profesión, de manera totalmente vergonzante.

Curiosos trabajos sobre la electricidad humana

Nina Schlippenbach, Vladimir Jabotin y Pabel Guleaev, biólogos de la universidad de Leningrado, realizaron en 1967 unas experiencias en lo que llamaron el Electroaurograma, o registro y medida del campo electromagnético existente en el cuerpo humano y en torno a él. Declararon que la actividad de los tejidos vivos está estrechamente ligada la actividad de las corrientes biológicas que se generan en los tejidos, las cuales pueden ser captadas y medidas. 


Descubrieron que cuando se encontraba un objeto metálico cerca de la persona cuyo electroaurograma deseaban establecer, se dispersaban los impulsos nerviosos, lo que no sucedía cuando ese objeto era de naturaleza aislante.

Vieron así que las personas que no llevan encima objetos metálicos crean un ambiente eléctrico que favorece su equilibrio biológico.

Los anillos de oro y los pendientes de plata anulan, en cambio, ese equilibrio y ahuyentan las emociones.

No sucede esto con las piedras preciosas, que por ser aislantes se oponen a la influencia negativa de los metales.

Determinaron a continuación el esquema fotográfico de los principales campos eléctricos del ser humano, que se localizan en el cerebro, las rodillas y el corazón.

El cerebro aumenta de tamaño en el momento de mandar una orden a los músculos.

Esta particularidad del cerebro podría tal vez explicar el origen de ciertos fenómenos paranormales. Una persona sensitiva podría intuir, en teoría, los actos que fuera a realizar alguien, al captar los cambios sufridos en su cerebro.

En apoyo de la tesis de los tres biólogos soviéticos podría estar el hecho de que, sin son los pueblos primitivos los más aptos para revelar aptitudes paranormales, sería porque andan descalzos.

Reciben así la energía telúrica, la cual se descarga a través de las pulseras de cobre con que adornan los brazos y el cuello.

¿QUÉ SON LOS CHAKRAS?



La palabra chakra proviene del sánscrito y se traduce como rueda, por referirse a las ruedas de energía del cuerpo etéreo que da vida a una parte de nuestro cuerpo físico.

La energía que actúa detrás de nuestro cuerpo físico se desenvuelve dentro de un sistema muy perfecto. Dentro de cada ser existe una inmensa red de nervios que interpretan todo lo que acontece en el mundo exterior, es decir en el mundo físico. que está formado: por nuestro cuerpo energético, nuestros centros son los chakras y los 3 canales energéticos los nadis (ida, pingala y sushumna), todos ellos cuidan de nuestro ser físico, espiritual, intelectual y emocional.

Los chakras son los puntos energéticos que gobiernan nuestro cuerpo físico al propio tiempo que regulan la absorción y salida de la energía.

Cuando un chakra se desarrolla a través de nuestro trabajo con él, pasa de un estado de latencia a un estado de actividad que será más o menos grande según lo que lo hayamos desarrollado.

Toda nuestra negatividad como podrían ser el odio, los nervios, el estrés, la envidia, el orgullo, los apegos a las cosas materiales, etc., bloquean el funcionamiento normal de los chakras o centros energéticos y a su vez por esta razón se bloquea también el buen funcionamiento de todo nuestro organismo, por lo que surgen la mayoría de las enfermedades que conocemos tanto a nivel físico como psíquico.

Para que el equilibrio o desbloqueo de los chakras se produzca hay que poner en funcionamiento óptimo el flujo de energía que por ellos circula con el fin de abrirlos al máximo y que estos nos ayuden a mantenernos sanos de mente, cuerpo y espíritu.


1º CHAKRA: BASE DE LA COLUMNA - MULHADARA


PUERTA DE LA VIDA Y LA MUERTE. LUGAR DE NACIMIENTO Y DE LA REENCARNACIÓN. ASOCIADO CON TIERRA. CAPACIDAD PARA TOMAR DE LA ABUNDANCIA DEL PLANETA.

Color: rojo. El rojo es el símbolo de la vida, la fuerza, la vitalidad y la naturaleza física del ser humano. La experiencia ha probado que las plantas colocadas bajo un globo rojo crecen cuatro veces más rápidamente que las expuestas a la luz normal. Por el contrario, su crecimiento se efectúa con más lentitud si se colocan bajo un globo azul o verde. El rojo estimula, pues, la vitalidad, mientras que el verde y el azul demoran la actividad energética.

En la naturaleza el rojo se asocia con el fuego y el calor. El ser humano ve rojo cuando sucumbe a la cólera o a una violenta pasión. El rojo del fuego terrestre se transforma en amarillo dorado, color de la pura esencia espiritual, la del Fuego Divino.

La utilización del color rojo da excelentes resultados en el tratamiento de las enfermedades producidas por una deficiencia sanguínea, como en el caso de la anemia, por ejemplo. Actúa igualmente con eficacia cuando hay mala circulación de la sangre, adelgazamiento anormal, desnutrición, depresión y letargo.

El rojo posee una vibración que engendra calor. Es el color dominante entre los pueblos primitivos. El rosado es el color de la armonía universal.

2º CHAKRA - SVADHISTHANA


ELEMENTO AGUA. CENTRO DE ELECCIÓN SEXUAL. PODER DE GENERAR ENERGÍA DE LA VIDA.

Color: anaranjado. El anaranjado es el símbolo de la energía. Es un color cálido, positivo, estimulante, que facilita la asimilación de los alimentos y regula la circulación sanguínea. Es esencial para lo que se refiere a la vitalidad y la salud. El anaranjado es la combinación del rojo y el amarillo, y se sabe que el rojo es igual a personalidad, y el amarillo es igual a sabiduría. Este color nos ayuda a controlar los movimientos de cólera y las reacciones negativas.

3º CHAKRA: EL PLEXO SOLAR - MANIPURA


CENTRO DEL PODER MASCULINO. VOLUNTAD. CUESTIONA EL PODER Y EQUILIBRIO DE LOS PODERES Y DONDE SE PRODUCE LA ASIMILACIÓN DE LA ENERGÍA QUE ABSORBE EL ORGANISMO. 

Color: amarillo. El amarillo es el símbolo del espíritu y el intelecto, de la inteligencia superior y la sabiduría, del plano mental, Su vibración positiva y magnética produce sobre el sistema nervioso un efecto tonificaste.

El plexo solar es el cerebro de nuestro sistema nervioso: Es nuestro Sol interior, nuestra central eléctrica personal, que debe encontrarse en estado de perfecto funcionamiento. El color amarillo es precisamente el regulador perfecto de este sistema nervioso que, de ser defectuoso, impide que el plexo solar distribuya la energía de manera coherente.

Las personas cuyo cuerpo absorbe rayos rojos en exceso son habitualmente delgadas y agitadas. Las que asimilan demasiados rayos azules son por el contrario flemáticas y tienen tendencia a engordar. Los rayos amarillos, por su parte, tienen la capacidad de neutralizar los rayos rojos y los azules.

El color amarillo contribuye de modo apreciable a la curación de la diabetes y también a combatir con eficacia la constipación.

4º CHAKRA: EL CORAZÓN - ANAHATA


ELEMENTO AIRE. EL TACTO. AMOR AL PRÓJIMO. RELACIONARSE CON TODO Y CON TODOS.

Color: El verde es el símbolo de la armonía, la simpatía, la creatividad, la salud y la riqueza de la naturaleza. Su vibración apacigua y equilibra el sistema nervioso. Combinación del amarillo (el alma) y el azul (el espíritu), cuarto color del espectro, el verde es el puente entre los tres primeros colores, en relación con el plano físico, y los tres últimos que son los que pertenecen al plano espiritual.

El verde es, pues, el centro mismo del espectro. Como la de la melodía, su vibración se desplaza horizontalmente materializando de ese modo el espacio, mientras que la vibración del azul se desplaza verticalmente a imagen de la armonía, que representa la noción de tiempo. Por la dirección de su desplazamiento, el verde y el azul forman la cruz, símbolo de la vida.

En la naturaleza, el rayo verde irradia desde todas partes (los bosques, los campos) y su efecto benefactor puede poner remedio a un sistema nervioso afectado permitiéndole adquirir nuevas energías.

Por la gran influencia que ejerce sobre el corazón, el color verde puede utilizarse con fortuna en el tratamiento de los problemas cardíacos y las afecciones vasculares.

5º CHAKRA: GARGANTA (GLÁNDULA TIROIDES) - VISHUDA


ASOCIADO CON LAS COSAS ETÉREAS. EL OIDO Y EL SONIDO. SE LOCALIZA LA CREATIVIDAD. VIBRACIÓN. CLARIVIDENCIA E INVOCACIÓN. 

Color: azul- celeste. El azul es el símbolo de la inspiración, la devoción, lo infinito y las aspiraciones religiosas. Este color eleva, exalta e inspira. Su vibración engendra la calma y la paz interior y provoca el sueño.

El azul se vincula con la garganta, que es el centro de la palabra, y la garganta es el pasaje que permite que nuestro ser interior se manifieste y entre en contacto con el mundo exterior. Es por la palabra que podemos traducir nuestras emociones y sentimientos.

La garganta es igualmente el centro de la pureza.

El rayo azul posee un amplio poder curativo, es sumamente eficaz en el tratamiento de los bloqueos del lenguaje y en las enfermedades de la garganta: inflamación, hemorragia interna y crispación.

Como este color se asocia con la ausencia de calor, sus propiedades son sedantes y astringentes. Mientras que la capacidad del azul oscuro es de gran potencia, el azul claro produce una elevada inspiración moral.

6º CHAKRA: TERCER OJO - AJNA


CAPACIDAD. CONCIENCIA. CENTRO DEL PODER FEMENINO. CREACION REALIDADES PERSONALES.

Color: índigo. El índigo es el símbolo de la frontera mística, la realización espiritual y la sabiduría dominada gracias al conocimiento de sí. Este color nos ayuda a descubrir la visión interna y externa favoreciendo la apertura gradual del Tercer Ojo y el inconsciente: Por su intermedio los recuerdos de nuestra alma emergen de su sueño profundo.

El rayo índigo es el puente que vincula lo limitado, con lo infinito. Elimina los elementos negativos de nuestra conciencia y nos permite reorganizar nuestras fuerzas vivas de manera positiva. Nos guía y nos brinda su asistencia durante el curso del viaje interior que emprendemos en busca del conocimiento cósmico y la verdad.

La utilización del índigo es particularmente eficaz en el tratamiento de las enfermedades mentales como también en la investigación científica y filosófica.

7º CHAKRA: CORONILLA - SAHASRARA


CORRESPONDE AL NIVEL MÁS ALTO DE PERFECCIÓN ESPIRITUAL. PERCEPCIÓN GUIAS ESPIRITUALES. FACULTAD DE CANALIZACIÓN. CONEXIÓN CON EL ESPÍRITU. 

Color: violeta.

El violeta es el símbolo del misterio espiritual.

Formado por la combinación del rojo (materia) y el azul (espíritu), provoca en nuestra evolución una transformación que puede resultar dolorosa.

Sus tonos más oscuros se asocian con las penas y la tristeza.

El púrpura simboliza la realización espiritual, en tanto que los matices lilas claros representan la conciencia cósmica y el amor de la humanidad.

El violeta azulado concuerda con el idealismo trascendental.

En las aplicaciones curativas, el violeta hace maravillas en el tratamiento del insomnio y las enfermedades nerviosas que provienen de perturbaciones mentales. 

RADIESTESIA PRÁCTICA -  DETECTE ONDAS DE FORMAS

El arte de detectar radiaciones por medio de una varilla o un péndulo es tan antiguo como el ser humano. Civilizaciones anteriores lo utilizaron para detectar las energías negativas del suelo, encontrar agua, minerales y objetos perdidos.

En el valle de los reyes se encontraron varios péndulos pertenecía a los sacerdotes egipcios, los que utilizan con asiduidad.

Hoy en día la Radiestesia, palabra que significa sensibilidad a las radiaciones, es una herramienta fundamental del psicotrónico.

Usted puede convertirse en un excelente radiestesista. Todo está en la práctica y la dedicación.

Simplemente se trata de comprar o construir un péndulo, palabra que designa a todo objeto pendiente de un cordel o cadena.

El objeto pendiente puede ser un anillo de oro, una bolilla de madera o un simple cairel de araña. El cordel, un hilo o una cadena de unos veinticinco a treinta centímetros.

Con el péndulo pueden detectarse las polaridades de las energías. Su sensibilidad nos permite también utilizarlo como elemento mantico ya que, con el entretenimiento, esta prolongación del inconsciente, puede contestar por sí o por no ante cualquier inquietud.

Una vez conseguido el péndulo y antes de utilizarlo es conveniente dejarlo tres días en la mesa de luz para que se vaya integrando a su propia energía. Lo importante es que este elemento se convierta en algo especial y querido por usted.

Téngalo durante un tiempo en su mano, mírelo, contémplelo y piense en él. De esta manera lo cargará con sus energías.

Luego póngale un nombre y manténgalo en secreto. Cuando haga esta operación, llévelo al centro de la frente y bautícelo con un nombre especial que solamente usted sabrá.

Tómelo con los dedos pulgar e índice y hágalo pender de su mano.


Establezca ahora su convención mental de giro. Cuando el péndulo gira en favor de las agujas del reloj está contestando que si y en sentido contrario que no.


Cuando el péndulo realice una línea recta su respuesta será "neutro".


Coloque ahora su péndulo en el centro del diseño y verá que tenderá a girar en el sentido de las agujas del reloj. Si no lo hace muévalo expresamente hasta que tome ese giro luego de dejarlo pender libremente. Al girar en el sentido de las agujas del reloj dice la palabra "si". 

Haga ahora lo propio con el siguiente diseño y verá que el péndulo toma un giro contrario a las agujas del reloj. Aquí estaría indicando la palabra "no".



Colóquelo ahora en el centro de la línea horizontal y luego de la vertical hasta que tome el movimiento llamado neutro. 

Practique varias veces estos ejercicios. Una vez que obtenga resultados estará listo para utilizar el péndulo.

EJERCICIO DE BÚSQUEDA DE OBJETOS

 



Por medio de este ejercicio usted podrá poner a prueba su péndulo indicándole que busque un objeto escondido.

Consiga tres cajas de fósforos y una moneda.

Procure un ayudante que introduzca la moneda en una de las cajas de fósforos sin que usted mire la operación.

Luego tome su péndulo y detecte en cuál de las tres cajas se encuentra la moneda.

Repase con tranquilidad todas las cajas. Su péndulo deberá oscilar en sentido horario sobre la caja que posee la moneda en cuestión.

BÚSQUEDA DE OBJETOS CON TESTIGO


Muchas veces es necesario orientar el péndulo hacia la búsqueda de objetos. Consiga un tubito con tapa.

Procure tres vasos y llénelos con agua. Haga que su ayudante introduzca una cucharada chica con sal en uno de los vasos sin que usted vea la operación.

En el tubito coloque agua con sal como testigo.

Tome el tubo en la mano izquierda y con la derecha detecte con su péndulo cuál es el vaso que tiene la sal. Repita esta experiencia varias veces. No olvide que el éxito de la radiestesia depende de la práctica reiterada de los ejercicios.

POLARIDAD CORPORAL


Este ejercicio nos permite detectar las polaridades positivas y negativas de las personas y por medio del mismo, podremos saber el estado energético de las mismas.

Para ello pídale a una señorita que coloque su palma derecha hacia arriba. Coloque el péndulo sobre ella a unos centímetros del centro de la palma. En la mujer, el péndulo deberá girar en sentido negativo. En el hombre girará en sentido positivo. Si en la mujer gira en sentido negativo significa que se encuentra armonizada. Si en el hombre gira en sentido positivo significa que se encuentra armonizado. Como vemos las polaridades entre hombre y mujer varían.

Si el giro del péndulo en la mujer es positivo significará que la misma está desarmonizada. Si el giro del péndulo en el hombre es negativo significará que está desarmonizado.

COMO ARMONIZAR CON PÉNDULO


Si usted detecta una desarmonía tanto en hombre como en mujer realice la siguiente operación. Ubíquese frente a la persona sentada. Convoque a la energía cosmotrónica imaginando el triángulo cósmico. Imagine que de su péndulo surge una fuerte luz blanca armonizadora. Haga girar el péndulo en sentido horario tanto para la mujer como para el hombre, sobre la palma de la mano derecha. Realice esto durante unos minutos y luego podrá medir nuevamente para corroborar la diferencia. 

Otra forma de armonización consiste en realizar la operación anterior y transmitir sobre vórtice coronal. 

NERGETIZACIÓN CON RADIESTESIA

Por medio del péndulo podemos trasmitir colores que por su valor energético pueden ayudar a armonizar a una persona o un lugar.

Cargue energía del triángulo cósmico e imagine que su péndulo trasmite el color buscado.

Si quiere hacerlo a distancia utilice la foto de la persona, concéntrese en su péndulo y trasmita haciéndolo girar durante unos minutos en sentido horario.

Si la persona está en proximidad haga lo propio sobre la palma de la mano.

COMO DETECTAR LAS DESARMONÍAS ENERGÉTICAS DE LOS VORTICES MAGNOS


Este procedimiento le permitirá detectar las desarmonías de los vórtices magnos y luego dispondrá la forma de lograr una rápida armonización.

Con su péndulo en mano derecha. Coloque la palma de su mano izquierda sobre coronal a unos centímetros de la piel.

Sostenga su péndulo con mano derecha y concéntrese en su giro. Si el mismo es en sentido horario usted está detectando un buen funcionamiento del centro coronal. Si el péndulo gira en sentido antihorario significará que el centro coronal está desarmonizado. En caso de que el péndulo conteste en neutro estará indicando que existe una traba en el giro de este vórtice.

Haga lo propio con los vórtices frontal, laríngeo, cardíaco

y umbilical.

 COMO ARMONIZAR VÓRTICES CON PÉNDULO Y COMO DETECTAR ENERGÍAS DE FORMA


Para armonizar los vórtices con péndulo deberá proceder de la siguiente forma: Absorba energía del triángulo cósmico. Visualice el color que corresponde al vórtice que debe armonizar. Haga girar su péndulo en forma positiva a la altura del vórtice en cuestión. Ubique su mano izquierda en forma de antena sobre su cabeza. Con la derecha haga girar el péndulo en forma positiva sobre el vórtice imaginando que el mismo recibe el color.

Realice este procedimiento durante unos minutos.

Las energías de forma son fácilmente captables con el péndulo.

La primera práctica consistirá en detectar las energías de forma de una copa vacía. Tome una copa vacía y ubique su péndulo sobre la misma.

Notará que su giro es negativo. Llénela de agua y verá que el giro se convierte en positivo. Como expresamos en el capítulo 13, las copas vacías, los sombreros, los floreros vacíos, los sótanos y otras formas huecas producen energías negativas.

Realice esta práctica con sombreros, floreros vacíos y otras formas negativas.


***
Instituto CEPE de Argentina

Escuela de Parapsicología y Disciplinas Complementarias

Profesor Miguel Antonio Ojeda

Parapsicólogo, Experto en Actividad Paranormal

Tel. 54 (11) 4382-9747 – WhatsApp. 1144785458 Av. Corrientes 1250. CABA- Argentina 

ABIERTA LA INSCRIPCIÓN TODO EL AÑO PRESENCIAL YA DISTANCIA

PARA OBETENER INFORMACION COMPLETA ESTE FORMULARIO: https://cepedeargentina.com.ar/contacto/

Cliquea acá O
LLAMAME

 Licenciatura en Parapsicología Integral con Orientación a la Alta Magia Psíquica 

O a las Disciplinas Complementarias

COMIENZA EN MARZO / ABRIL Y FINALIZA EN DICIEMBRE DE CADA AÑO

DURACION 3 AÑOS

Incluye, entre otros, estos cursos: Numerología, Grafología, Tarot, Astrología, Quilología, Manejo Alternativo de las Energías. Ritual de Alta Magia y Psíquica, etc.

Egreso como Parapsicólogo Profesional para Trabajo de Consultorio y de Campo

Matricula con Respaldo CEPE / APAPRA – Fundado el 5 de junio de 1985

Asociación Civil Personería jurídica Otorgada por la Inspección General de Justicia de la Nación Argentina – Bajo Resolución 0001185/05

https://www.cepedeargentina.com.ar/parapsicologia/ – coordinadorcepe@gmail.com

Para consultas personales con el profesor miguel Ojeda, llame a este número 011-43828824

O por WhatsApp o Telegram: +54 9  1144785458

Web:  https://www.profesormiguel.com.ar/ - Emailprofesormiguel@gmail.com 

Comentarios

Publicar un comentario

Estimados me gustaria que pongan sus nombres reales en lo comentarios

Entradas populares